Un corrusco es un rescaño de pan, un canterón. Es ese pedazo de la corteza del pan que apetece pellizcar y llevarse a la boca, sobre todo cuando está caliente. Ya sabes, pan de hogaza de miga esponjosa y corteza dorada o con poca humedad y corteza gruesa y miga compacta capaz de servir de plato.

Ese recuerdo infantil me lleva a crear los Corruscos, niños y niñas en esa edad en la que todo era posible, con las enormes botas de goma como señas de identidad, las coletas, el flequillo..

El juego era que pudieran hacer toda una serie de actividades y que conservaran la frescura y la espontaneidad, que posaran sin posar.

Además he querido enmarcarlos en colores alegres, que refresquen y den alegría.

Embalaje específico, con papel de estraza, cuerda, lacre y la tarjeta para el destinatario. Casi como si fuera un envío de antaño, donde todo era sorpresa.

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Personalizamos tu Corrusco.

Con tu nombre, cambiamos el color del marco o nos inventamos tu afición o escena favorita

Marcos Vintage, coloristas y alegres. Marcos decapados de 34 x 26 cm y piezas en pizarra tallada de 17 x 10 cm.

Fondos de papeles de algodón con incrustación de otros papeles, plantas, textíles ...

Todo tipo de actitudes, situaciones y oficios de nuestros protagonistas.

Marcapaginas de 20 x 5cm, presentados en funda transparente de plastico y opaca, en papel kraft. Van montadas sobre cartulina y papel de dibujo de 160g y se acompañan de una pieza de papel de guardas o veneciano.